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morderse las uñas, o por como también se lo conoce, onicofagia, es un mal hábito que si bien tienen muchas personas no hay que subestimar, ya que no sólo puede desgastar, con el tiempo, las piezas dentales sino que también puede llevar a infecciones intestinales o a padecer hongos en las uñas, entre otros.
Este problema suele tener una raíz nerviosa, por lo que habrá que intentar controlar primero los nervios y ansiedades. Además, es muchas veces difícil en el caso de niños, ya que si se les reta y no se les explica los motivos por los cuales no deben hacerlo, no sólo raramente será efectivo sino que incluso provocará el efecto contrario.
Al pequeño se le puede explicar que hay veces en que las personas se muerden las uñas cuando están muy preocupadas, molestas o nerviosas y alentarlos a hablar sobre lo que les sucede, o incluso se los podría incentivar con algún tipo de “recompensa” si cumplen con lo acordado de dejar de morderse las uñas.
para el Estudio del Estrés y la Ansiedad (SEAS) se recomienda a estas personas mascar chicles y mantener, en lo posible, las manos ocupadas, así como también llevar siempre consigo unalima de uñas para retirar ruturas en caso de ser necesario y no tentarse así con morderlas.
Asimismo, y como suele tener una base nerviosa, se les aconseja reducir al máximo o evitar el consumo de alcohol y café, hacer yoga u otra disciplina que ayude a reducir el estrés, escuchar música relajante y cualquier otra actividad conducente al mismo fin.

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